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lunes, 23 de marzo de 2015

Conductas de Riesgo en la Adolescencia



La adolescencia es un periodo crucial en la vida de todo sujeto, en el que se está expuesto a diversas situaciones de riesgo, mismas que pueden ser resueltas de forma adecuada o no. Es una etapa de gran importancia en términos de consolidar formas de vida que permitan mantener la salud y retrasar el daño.

Definimos las Conductas de Riesgo como las actuaciones repetidas y fuera de determinados límites, que pueden desviar o comprometer el desarrollo psicosocial normal durante la adolescencia, con repercusiones perjudiciales para la vida actual o futura.

Algunos ejemplos de éstas, son: uso y abuso de tabaco, alcohol y otras drogas, conducta sexual arriesgada, hábitos dietéticos alterados, adicción a medios electrónicos, sedentarismo, depresión, conductas de violencia e inseguridad que conducen a los accidentes y a la delincuencia.




Este tipo de conductas, pueden ser potencialmente prevenibles en la adolescencia temprana, desafortunadamente, se observa un considerable aumento a nivel mundial. La familia se constituye por tanto, como un factor indispensable para brindar elementos que fomenten un crecimiento y desarrollo saludables para enfrentar peligros y vulnerabilidades. Cumple varias funciones determinantes en el desarrollo de sus integrantes, modela sentimientos y transmite patrones de conductas, pautas y normas de convivencia.

Simpson, recopila una serie de investigaciones que coinciden en demostrar que los padres son una fuerte influencia en el crecimiento saludable del adolescente y menciona cinco pilares básicos del rol para ser padres de adolescentes:

a. Ofrecer amor y conexión
b. Controlar la conducta y el bienestar del adolescente
c. Aconsejar, incluyendo negociación y fijación de límites
d. Ofrecer información y consulta para entender, interpretar y transitar por el mundo, a través de un proceso de ejemplo y diálogo continuo
e. Proveer y abogar por recursos, incluyendo otros adultos a quienes les importe


En la actualidad, los adolescentes están expuestos a diversos Factores de Riesgo, entendidos como aquellos elementos que tienen una gran posibilidad de originar o asociarse al desencadenamiento de un hecho indeseable, o de una mayor posibilidad de enfermar o morir.



Dichos factores están presentes en diversos ámbitos, como pueden ser:

* Propios de los padres de familia:
- Ausencia y distorsión de valores
- Maltrato hacia algún integrante de la familia
- Conducta criminal, adicciones, conductas antisociales de algún integrante
- Interacción negativa con los hijos
- Hogares con alto grado de discordia
- Hogares rotos con alto contenido de conflicto

* Propios de la escuela:
- Bajo rendimiento académico
- Interacción negativa de maestros con alumnos
- Sistemas disciplinarios escolares extremos (rígidos vs laxos)
- Desinterés por el desempeño académico de los alumnos
- Obsesión por el rendimiento académico descuidando la socialización de los alumnos
- El maestro no aprecia el trabajo de sus alumnos
- Hay nula o poca disponibilidad del maestro para atender los problemas de los alumnos
- Existencia y tolerancia de violencia escolar
- Ubicación de la escuela en un entorno criminógeno sin medidas preventivas y/o de protección de las autoridades

* Propios del entorno:
- Ausencia y distorsión de valores
- Influencia de amigos y conocidos con características antisociales
- Características del lugar donde se vive
- Programas televisivos, cine y revistas carentes de valores y/o con valores distorsionados, sin regulación y orientación paterna.
- Medios de comunicación con contenidos violentos
- Fácil acceso a pornografía y prácticas desviadas


Por ello, la familia juega un rol indispensable en la prevención de las conductas de riesgo, ya que influyen en el desarrollo de estilos de vida saludables, en formas adecuadas de expresar afectos, de relacionarse con los demás, resolución de conflictos, entre otros.



Analicemos los diversos Factores de Protección (condiciones o entornos capaces de favorecer el desarrollo de individuos o grupos y, en muchos casos, de reducir los efectos de circunstancias adversas), que propician una adecuada prevención de las conductas de riesgo en la adolescencia.

* Factores dependientes de la comunidad y sociedad:
– Servicios de salud, recreativos y sociales
– Conexión con instituciones culturales, religiosas y de otros tipos
– Ciudad segura sin tolerancia a las drogas y sin violencia

* Factores individuales:
– Inteligencia y autoestima altas
– Habilidades para afrontar la adversidad, empatía
– Opinión optimista del futuro
– Alto grado de motivación para obtener logros y el futuro
– Ausencia de antecedentes familiares de conductas de riesgo
– Tener normas y valores convencionales, religiosidad
– Ausencia y/o correcto tratamiento de los trastornos psiquiátricos

* Factores Familiares:
– Adecuadas relaciones padres-hijos (Hogar estable)
– Disciplina y supervisión de los padres
– Mensajes apropiados sobre las conductas de riesgo

* Factores dependientes de la escuela:
– Buena relación de los jóvenes con la escuela
– Escuelas de calidad que ofrezcan oportunidades para el éxito y la participación

* Factores  dependientes de los amigos:
– Amigos que no abusan de alcohol, tabaco o  drogas, ni presentan conductas delictivas
– Amigos con valores convencionales e intereses compartidos


Reflexionemos:
  • ¿Cuáles son los factores de riesgo a los que está expuest@ tu hij@?
  • ¿Has observado que tu hij@ adolescente presente alguna conducta de riesgo?
  • ¿Qué factores de protección tiene al alcance tu hij@?


Referencias:

  • Escalante, F., Cómo prevenir conductas destructivas, Ed. Producciones Educación Aplicada, México, 2006
  • VALENZUELA MUJICA, María Teresa; IBARRA R., Ana María; ZUBAREW G., Tamara  y  CORREA, M. Loreto. Prevención de conductas de riesgo en el Adolescente: rol de familia. Index Enferm [online]. 2013, vol.22, n.1-2 [citado  2015-03-23], pp. 50-54 . Disponible en: <http://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1132-12962013000100011&lng=es&nrm=iso>. ISSN 1132-1296.  http://dx.doi.org/10.4321/S1132-12962013000100011.




Elaborado por: 
Claudia Verónica Villegas García

Originaria de Pachuca, Hgo., actualmente es Coordinadora de Psicopedagogía y Docente en la Preparatoria Zoebisch. Cuenta con la Licenciatura en Psicología y la Maestría en Tecnología Educativa.

1 comentario:

Daniel MM dijo...

Efectivamente hay que estar muy al pendiente de las actividades de los jovenes, y sobretodo tener una buena comunicación con ellos. Hay que aprender a ganar su confianza.